Tres hoteles españoles con historia que puedes disfrutar sin alojarte.
Los hoteles son testigos mudos de la evolución de las ciudades a lo largo del tiempo. Algunos de ellos, cargados de historia, se erigen como monumentos que narran las vicisitudes de su entorno.
Hoy te llevamos en un fascinante recorrido hacia cinco hoteles en España que no solo ofrecen encanto, sino que también albergan historias que han dejado una huella indeleble en sus paredes.
Los tres hoteles en España con la historia más original, en los que puedes pasar un día sin alojarte.
¿Lo mejor? No necesitas ser huésped de estos hoteles para reservar una experiencia. Así que puedes disfrutar de ellos tanto si se encuentran en tu ciudad y sin viajar o visitarlos durante una escapada, para mejorar aún más tu viaje con una experiencia lujosa.
Castillo Hotel Son Vida en Mallorca
De regalo romántico al glamour de la nobleza
Ubicado en una área de exquisita belleza natural, el Castillo Son Vida es una obra maestra que ha custodiado la isla desde el siglo XVI.
En sus inicios, la finca Son Vida era un idílico paraíso propiedad de la distinguida familia Vida. Fue a principios del siglo XX cuando el Marqués de la Torre emprendió la audaz metamorfosis de la finca en un castillo, con la incorporación de la torre de entrada y la renovación de los salones. Este gesto magnífico fue un regalo de ensueño del Marqués a su esposa, impregnando al lugar con un halo romántico que ha perdurado a lo largo de los años.
Desde entonces, el castillo ha evolucionado, convirtiéndose en un hotel de 5 estrellas en 1961 y abriendo sus puertas al deslumbrante glamour de la nobleza europea y de Hollywood.
Hoy en día, puedes sumergirte en todo su esplendor, disfrutando de uno de sus desayunos o reservando acceso ilimitado a su spa de más de 900 m², iluminado por la cálida luz natural. Una experiencia de lujo que te transporta a través del tiempo.
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Spa Siargao (1898 Hotel) en Barcelona
La emoción de nadar en una cueva
El Hotel 1898 es uno de los edificios más emblemáticos en el corazón de Barcelona. Su construcción se remonta a 1880, cuando se inició el proyecto de la residencia privada de los Marqueses de Comillas.
En 1924, el edificio experimentó una transformación al convertirse en la sede de la Compañía General de Tabacos de Filipinas. Por sus salones desfilaron personalidades prominentes de la época, dejando su huella en los exquisitos Salones Coloniales. En 2005, después de una majestuosa restauración que logró conservar y elevar sus antiguos esplendores, el edificio fue reimaginado como un hotel.
La verdadera joya oculta reside en lo que alguna vez fue la carbonera y, posteriormente, la cámara acorazada de la Compañía de Tabacos. Bajo las imponentes bóvedas, se encuentra hoy un circuito termal con una piscina cubierta de una sugerencia única.
La piscina cubierta, resguardada en este antiguo rincón lleno de historia, ofrece un escape relajante y la emoción de nadar en una cueva convertida en un oasis de serenidad. Es una experiencia de bienestar que va más allá de las expectativas convencionales.
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Gran Hotel Inglés en Madrid
El hotel más antiguo de Madrid
El debate sobre cuál es el hotel más antiguo de la ciudad apasiona los madrileños desde hace años. Entre posadas con historias ricas, el Gran Hotel Inglés se destaca como el primer hotel propiamente dicho, inaugurado en 1853 como un faro de elegancia y servicio excepcional.
Cuando abrió sus puertas en 1886, marcó un hito significativo al convertirse en el primer hotel madrileño con restaurante y alumbrado eléctrico. Innovador para su tiempo, ofrecía lujos revolucionarios, como un teléfono y un aseo con agua corriente en cada planta.
La trayectoria del Hotel Inglés es tan extraordinaria como sus inicios. En tiempos de guerra civil, se transformó en un hospital y refugio. Además, se convirtió en un refugio literario, donde mentes brillantes como Virginia Woolf, Pérez-Galdós y Valle Inclán se congregaban regularmente. Incluso, la leyenda cuenta que su lobby fue el punto de encuentro favorito de espías durante la Segunda Guerra Mundial (très chic).
Hoy en día, el Hotel Inglés se erige como un oasis urbano, albergando el exclusivo spa de Sisley, una de las casas parisinas más distinguidas. Aquí, puedes sumergirte en la opulencia del entorno Art Decó mientras disfrutas de masajes y tratamientos exclusivos.
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